Soy un convencido que lo que mejor funciona son los sistemas. Las fórmulas. Los métodos y las estrategias. Y que si funcionan para otros, podemos aplicarlos nosotros (con nuestra impronta, nuestras modificaciones y adaptaciones a nuestras particulares circunstancias) y podemos aspirar a resultados más o menos similares.

Es lo que hacen, por ejemplo, en Hollywood con las películas de acción, terror, romance, etc. Sabes que si sigues una
fórmulita más o menos similar, el resultado será, al menos, bueno. Aceptable. Y eso hará la diferencia entre muchos
dólares o un gran fracaso de taquilla. Cómo hacemos para lograr lo mismo nosotros con nuestro negocio?

Se puede trasladar este concepto a la «atracción de clientes» usando Internet?

No sólo eso! Internet YA no es lo que vendrá. Es lo que ya está aquí. Es lo que muchos están usando para atraer clientes y
tú también deberías estar haciéndolo. El problema de todo es que muchas personas ponen expectativas irreales. Utópicas.
Por decirlo de una forma elegante y no usar palabras como infantiles.

La cosa es que después se fastidian cual niños caprichosos (y de ahí el adjetivo de infantiles para las expectativas)
cuando las cosas no salen como esperaban.

Sí: lo digo así porque también me pasa. Conmigo y mis negocios online.
Y con los de mis clientes.   
Te llama la atención que lo diga así? Pues no! Es verdad! Algunas veces creo campañas para vender, por ejemplo, mis cursos, y creo que voy a vender miles (por lo menos) de esos cursos. Y la respuesta de la gente NO es lo que yo creía que 
sería. Y en lugar de ver qué hice mal para cambiarlo. Y lo que hice bien para replicarlo. Y así aprender y mejorar…lo que hago es fastidiarme como nene caprichoso al que no le dieron el postre que quería…

Y los clientes, muchas veces, hacen lo mismo…

– Pero Pablo: yo escuché que tal empresa generó 100 mil fans en 5 días y vendió 2500 pares de tal cosa con Facebook.

No estoy exagerando. Me dijeron una vez algo parecido.

La empresa a la cual se refería este cliente era DELL. Pero mi cliente no era DELL. Y no quería invertir lo que DELL había
invertido en generar 100 mil fans en 5 días. Y no tenía el branding de DELL. Y no estaba dispuesto a bajar los precios de
la forma en que DELL lo había hecho con sus computadoras para venderlas a través de su fanpage.

 

Por eso es importante que,  a la hora de iniciar una campaña en Internet para tu negocio (ya sea para hacerte más conocido, 
para atraer o fidelizar clientes, para promover un producto o servicio o incluso para vender) SEPAS que Internet es sólo 
un canal más. Mucho más efectivo que cualquier otro medio que exista a la fecha? Mejor y más barato y rápido que un 
diario, que las revistas, la radio o la TV? Sí, con certeza!

 Con la posibilidad de invertir una sola vez y crear verdaderos imánes online de atracción de clientes? Sí, con   certeza!

«Centros de co-creación» donde tus mismos usuarios y clientes te dirán qué quieren para que tú puedas ofrecérselos y
         darles lo que tú sabes que necesitan? Sí, con certeza!

 Un lugar donde venderás las 24 horas, los 365 días del año, sin pagar costos extra? O, al menos, podrás sembrar las semillas para     que esto sea posible? Sí, con certeza!

 O que incluso te sirva para potenciar y aumentar tus ventas «del mundo real» sin importar qué es lo que haces? Sí, con certeza!

Pero con el gran «pero» que Internet no hace milagros. Incluso Gangan Style * (que no es ni por cerca una melodía comparable con la cuasi-mística música de Vivaldi) tiene su encanto.

* NOTA: para aquellos que no lo saben, en el año 2012 la canción Gangan Style de Psy se convirtió en el video más visto de la historia en Youtube y una de las canciones más descargadas online.^

La gente no consume cualquier porquería. Al menos, esa «porquería» debe tener una apariencia de ser algo que sirva. Y es ahí donde tenemos que procurar invertir nuestro tiempo y dinero! No en el «envoltorio atractivo de la porquería». Sino en darles a nuestros clientes y potenciales compradores ESO que ellos están buscando. Lo que ellos quieren. Entender por qué lo quieren. Y luego, saber cómo nuestro producto o servicio es capaz de satisfacer esa NECESIDAD.

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Y entonces seremos realistas con respecto a nuestras expectativas. Internet te permite  saber con certeza casi matemática cuántas personas están buscando lo que tú tienes para ofrecer. Pero no sólo eso: también te dice su sexo, su edad, su nivel de estudios y muchos otros datos más (como si están casados o comprometidos). Y, si quieres ponerte exigente, también te dice (Internet y sitios con Facebook, Google y otras herramientas «secretas») dónde TUS clientes ideales suelen «perder su tiempo» online: qué sitios visitan, qué páginas visitan. Dónde compran, qué les gusta leer o ver  en TV. O qué música o radio oyen. Todo esto puedes elegir con un nivel de precisión nunca antes
visto en toda la historia.

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Y lo increíble de todo esto no es este nivel de precisión. Sino 2 cosas:

1) Lo económico que es: me encuentro con gente que destina miles de dólares a publicidad en las páginas amarillas, en la radio o la TV. Pero no están dispuestos a invertir MENOS de 1000 dólares a una campaña online que atraiga a estos clientes potenciales.

2) Que aún, por el motivo del punto anterior, no estén TODOS usando estas herramientas online para atraer clientes.

Deberían estar TODOS los negocios locales, ya sea que vendan o no en Internet, estar usando estas herramientas. Y, sin embargo, prácticamente hay que «obligarlos» a que lo prueben.

Otro problema que no puedo dejar de nombrar es que hay (como diríamos aquí en Argentina) «mucho chanta suelto». Habladores, auto-consagrados gurúes que no sólo no tienen la menor idea de cómo se usan estas herramientas. Sino que prometen (sólo para sacar dinero a los incautos) que lograrán miles de ventas en días.

Y cuando estos descuidados estafados descubren que su dinero fue sólo a engrosar la billetera del charlatán, ya es demasiado tarde. Pero el gran problema es que este estafado no sólo evitará por completo volver a invertir su dinero en campañas por Internet. Además se encargará de gritar a los cuatro vientos que «Internet no sirve para atraer clientes ni para vender».

Y así tendremos «embajadores anti-marketing-online» que no son otra cosa que frustrados o estafados. Sólo comparto esto contigo como una suerte de catarsis por lo que suelo ver todos los días en mi trabajo como consultor y asesor de marketing aplicado en Internet. Mentiras, exageraciones, caprichos y frustraciones. Pero también muchos éxitos, alegrías. Y ventas! Y clientes conformes! Del lado de los que compran, del lado de los que venden más!

Sigue creyendo, porque es posible! Muchos lo comprobamos a diario! El secreto es tener un buen «Sistema Efectivo» que te permita prever qué resultados obtendrás.

Por tu éxito!
Te mando un abrazo a la distancia!

Pablo Ciccone