Descubre si sufres el Síndrome Cenicienta (y su
antídoto para tus próximas vacaciones)
Seguramente vas a conocer esta historia…No, la de
Cenicienta sé que la conoces…
A la que me refiero es a esta otra historia…La
tuya…
Eliges un lugar para tus próximas vacaciones. De
hecho, lo sabes con mucha anticipación porque ese
lugar es «tu lugar». Ahorras todo el año, y cuentas
los días en el almanaque. Como un niño mira cuánto
falta para Navidad. O para que terminen las clases…!
Llega el día que tanto esperaste y te vas allí, a «tu
lugar en el mundo» con tu pareja, tu familia. O solo.
No importa…
El lugar te encanta. Piensa en ese lugar ahora…Todos
tenemos un «lugar ideal». El tuyo puede ser en el mar,
la montaña, cerca del río, con calor
o frío…Tú eliges ese «lugar ideal»…
Tus días allí son apacibles (claro, si es que tus
hijos están entretenidos con algo)…Los que sean
padres/madres saben a qué me estoy refiriendo…
Te levantas tipo 9 ó 10 después de haber descansado
plácidamente. Sin ruidos, sin bocinas. Sin apuros para
salir al trabajo…
Y te vas a comprar cosas para el desayuno. Quizás eres
de los que tiene «espíritu de deporte» y caminas un
rato antes de desayunar…
O de los que no puede «desconectarse» del todo, y
compras el diario. O lo ves por Internet…
Quizás pases el día recorriendo lugares, o tirado en
la playa, etc.
Y luego, vuelves a tu hotel, posada, casa…
Te das un placentero y renovador baño caliente…
Y vuelves a caminar «al centrito» para «ver qué
onda»…O para comprar provisiones. O para que los
chicos jueguen un rato. O sólo para caminar. Lento.
Tranquilo…
O eliges quedarte en casa esa noche con tu pareja
jugando a algo (no seas mal pensado)…
…o en familia, disfrutando de una cena, de un rato
de TV, de una película…
Y, en ese momento, el idilio te recuerda que faltan
pocos días para volver a tu «vida real».
Y, sabes, que no hace diferencia si lo que faltan son
5 ó 15 días. Siempre parece poco, no?
Y es como tener un gusto agridulce todo el tiempo…
Entonces, algunos más osados empiezan a averiguar
precios de casas en ese lugar…
…y hablas con tu pareja y le dices «imagínate
viviendo aquí…quizás podríamos ponernos una tienda y
hacer tal cosa…»
Te suena todo esto? Te ves en estas situaciones?
Esto es lo que yo llamo «el Síndrome Cenicienta». Como
a ella, cuando le llegó la hora de romper el hechizo,
a ti también te llega «tu medianoche» con las
vacaciones de este año…
…el día de volver a «la vida real» de todo el año…
…a lidiar con el trabajo, con las obligaciones, con
despertarse muy temprano, el tránsito, jefes,
compañeros, y tú puedes agregar lo que tú ya sufres
día a día…
…y, en general, por más lamentos, resistencia,
indignación y demás…no hay otra opción…
Mi pregunta es: Realmente NO tienes otra opción?
Quiero que pienses bien qué vas a responder…
…porque de tu respuesta, dependerá el que puedas
lograr o no que realmente esa opción exista…
Y vas a ver cómo, con un término nuevo, vamos a
construir una opción viable, posible, divertida y que
rápidamente te permita lograr algo como esto…
…como lo que siempre quisiste…
Y no sólo eso. Voy a demostrarte para que compruebes
que sí es posible lograrlo, porque…
Es lo que yo llamo el antídoto para el Síndrome
Cenicienta que todos sufren. Y que yo sufría antes
también…
Hasta que aprendí a tener un estilo de vida
diferente...a vivir de Trabaciones…
Sí, tal cuál lo que lees. Estar de vacaciones y, al
mismo tiempo, trabajando haciendo lo que más me gusta,
en «mi lugar en el mundo». Para así ganar dinero para
no tener que sufrir el síndrome Cenicienta nunca más.
Al menos, con las vacaciones…
Si quieres más información de cómo tener este
«antídoto» en tu vida, ingresa aquí…
https://pablociccone.com/trabaciones
Por tu éxito!
Un abrazo a la distancia!